Independencia
Rocío García Olmedo*
Desde su conformación la Comisión Especial para la conmemoración del Bicentenario de la Independencia y Centenario de la Revolución en el Congreso poblano, consideró que estas conmemoraciones ofrecían una excelente oportunidad para el análisis y la reflexión.
Pensamos que estos eventos que históricamente han venido siendo ritualizaciones del pasado, debían ser, por el contrario, un ejercicio de difusión y revisión de los acontecimientos históricos que forjaron la Nación y el Estado mexicano y con ello contribuir a la reflexión presente en torno a los principios y legados de ambos movimientos sociales.
En la víspera de las ceremonias conmemorativas a los doscientos años del inicio de la Independencia, sin duda resalta el esfuerzo de muchas personas, investigadores, especialistas y expertos por acercarnos a nuestro pasado desde otros enfoques historiográficos, permitiendo rescatar otras versiones de esa historia, acortando con ello, la distancia para conocer, no solo de la aportación de otros personajes hombres y mujeres durante este período, sino también, reconstruir este movimiento insurgente que concretó Agustín de Iturbide en 1821, sin dejar de hacer énfasis en las figuras de Miguel Hidalgo y José María Morelos y Pavón de indiscutible importancia; y por supuesto el Grito del día 15 de septiembre enraizado en la memoria colectiva.
Movimiento violento, devastador, que nos han documentado los especialistas no puede separarse del contexto que enfrentaban las potencias europeas en aquella época -como lo señala la Dra. Alicia Tecuanhuey- “Que el grito de Dolores era imposible entenderse si era desconectado de los efectos políticos que tuvieron las abdicaciones de Bayona de los reyes españoles en 1808” de ahí la consigna de Hidalgo de “Muera el Mal Gobierno” ¡Viva la Virgen de Guadalupe! ¡Viva Fernando VII!
Muchos nuevos aportes en esa secuencia de acontecimientos del movimiento de independencia hasta su consumación bajo el liderazgo de Agustín de Iturbide, a quien un año después le tocó festejar desde el balcón de la casa parroquial de la villa de Dolores Hidalgo a donde viajó y pronunció un discurso en el que reiteraba dejar atrás “los años y años de pasiones, combates y luchas entre hermanos” Y advertía “El germen que Hidalgo plantó en este lugar debe ahora desarrollarse vigorosamente y asociando la Independencia con la Unión, el porvenir es nuestro. Un pueblo que bajo la protección y con la bendición de Dios funda su independencia sobre la libertad y la ley, y tiene una sola voluntad, es invencible y puede elevar su frente con orgullo”.
Así también, hoy conocemos que Maximiliano patrocinó un programa iconográfico, integrador y conciliatorio en una muestra pictórica, que mejor ha logrado encarnar la visión de Hidalgo como Padre de la Patria.
En el estudio y análisis –todavía inconcluso- son muchas las lecciones que nos dejan los protagonistas de este movimiento, su historia sin duda apasionante, pero también compleja y dramática, nos da la oportunidad a los mexicanos y a los poblanos de hoy de “apostar porque la evocación del pasado se convierta en una manera de invocar nuestro porvenir” como bien lo ha señalado el Dr. Guillermo Hurtado director del Instituto de Investigaciones Filosóficas de la UNAM son las lecciones de apertura y tolerancia que nos aporta esta etapa.
De ahí la importancia de recobrar el sentido de la conmemoración de Bicentenario, en un momento tan complejo como el que se vive en México, este acercamiento a la historia nos puede ayudar a reconocer los problemas de presente y a retomar esas grandes lecciones de apertura y tolerancia que nos deja la investigación de esta etapa de construcción de nuestra nación.
Y con ello recordar las palabras de Guadalupe Victoria: “Cuando un pueblo salta sus barreras, casi ningún esfuerzo es bastante poderoso para detenerlo”.
Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.
*Rocío García Olmedo ha desempeñado diversos puestos públicos y políticos en el estado de Puebla, México. Rocío García Olmedo es diputada de la LVII Legislatura del H. Congreso del Estado de Puebla.
Más de la obra de Rocío García Olmedo:
- Doña Margarita García Flores
- Porqué no Arturo Chávez Chávez
- El velo
- Adolescentes delincuentes
- Guadalupe Victoria
- 17 de octubre de 1953
- "Reforma poco responsable"
- El sueño de la razón
- Etiquetar recursos
- Las celebraciones del bicentenario y centenario desde los Congresos de los Estados
- Violencia hacia las mujeres
- Ley de paternidad responsable
- Propuesta para derogar causales de divorcio
- En el 2010
- 200 años del movimiento independentista
- El trabajo científico y los movimientos sociales
- En recuerdo a Susan Sontag
- Algunas notas sobre la Constitución Mexicana
- Compromiso con las mujeres de México
- Estado mexicano laico
- Froylán C. Manjarrez, constituyente de 1917
- ¿Asunto de mujeres?
- A cien años de la propuesta del Día Internacional de la Mujer
- Tercer año del ejercicio legal
- Mujeres indígenas nañuz
- A revisión
- Credibilidad
- Asegurar una verdadera solución
- "Fuero militar"
- ¡Justicia!
- Por la vida, la libertad y los derechos humanos de las mujeres
- A diez años
- Entre los derechos, los deberes y la ignorancia
- Constitucional el uso de la píldora de emergencia
- La historia numismática en la insurgencia y la revolución
- Elogio de la traición del PAN a las mujeres
- Saramago-Monsiváis
- El voto de las mujeres
- Jornada electoral
- Reflexiones en torno a los resultados electores del 4 de julio de 2010
- ¿Ganó el PAN en Puebla?
- Aquiles en México
- Sentenciadas
- Segundo Período de Sesiones
- Cerrar filas
- Violentar el Estado de Derecho
- Mujeres Insurgentes
- El Encuentro Nacional Feminista
- Independencia
Facebook Social Comments