“Las previsiones éticas deben ir adelante
de los adelantos tecnológicos”
Abel Pérez Rojas.
Imagine usted el suplicio que sería capaz de propinar un policía fronterizo equipado con exoesqueleto y con características psicológicas racistas o xenofóbicas –como los que abundan en todas las latitudes- y qué me dice de las dimensiones violentas que podría adoptar el bullying.

Algunos hablan de que la incorporación de exoesqueletos en la vida diaria podría cumplirse muy pronto, en sólo diez o veinte años los exoesqueletos serán tan populares que su única limitante será inicialmente su alto costo.
Propongo que desde ahora se tome con seriedad la posibilidad de evitar futuras agresiones a quien esté inerme de dichos dispositivos.
El escritor futurista y científico ruso Isaac Asimov, planteó en 1942 en su cuento Círculo Vicioso (Runaround) las tres leyes de la robótica, a fin de prever los conflictos futuros ante los progresos evidentes de la robótica y el eventual revire de los robots hacia los humanos.
Las tres leyes de la robótica son:
Primera: Un robot no puede hacer daño a un ser humano o, por inacción, permitir que un ser humano sufra daño.
Segunda: Un robot debe obedecer las órdenes dadas por los seres humanos, excepto si estas órdenes entrasen en conflicto con la Primera Ley.
Tercera: Un robot debe proteger su propia existencia en la medida en que esta protección no entre en conflicto con la Primera o la Segunda Ley.
Así que, ante la potenciación de las facultades corporales de los humanos, para que el abuso de la fuerza, de la velocidad y de la resistencia no sean usados contra los débiles, mi planteamiento propone una postura ética de respeto a quienes no usen esos dispositivos: que los exoesqueletos, desde su fabricación, tengan una programación informática inicial con las medidas de seguridad necesarias.
Primera: Todo exoesqueleto contendrá protocolos de programación para detectar y no accionarse con los impulsos nerviosos de ira u odio de su portador en contra de otro ser humano desprovisto de exoesqueleto.
Segunda: Los diversos actores que participen en el diseño, desarrollo y construcción deberán trabajar y destinar parte de sus recursos para garantizar la Primera Ley.
Tercera: No se podrá comercializar ningún exoesqueleto que no se haya diseñado, desarrollado o construido bajo la Primera y Segunda Ley.
Por supuesto no estoy soslayando las aplicaciones médicas de los exoesqueletos, las cuales abren múltiples posibilidades de una vida digna a quienes por múltiples circunstancias están privados de sus capacidades motoras, ni tampoco las incalculables aplicaciones de los exoesqueletos en la industria, pero es oportuno, desde ahora, hacer visibles vías que eviten en el futuro episodios de sometimientos, vejaciones y muertes.
The three laws of exoskeletons
What to do in the not too distant future people equipped with exoskeletons do not abuse their abilities increased over others devoid of those attachments?
First: All exoskeleton contain programming protocols for detecting and operated with no nerve impulses of anger or hatred wearer against another human being devoid of exoskeleton.
Second: The various actors involved in the design, development and construction must work and allocate part of their resources to ensure the First Law
Third: No person may sell any exoskeleton that has not been designed, developed and built under the First and Second Laws
