16 de julio de 2023
La evolución del pensamiento
Enrique Canchola Martínez
Universidad Autónoma Metropolitana-Iztapalapa
Ciudad de México, México
La mente, ya no construye el pensamiento como una sola entidad, ya piensa como ella y como todas las mentes a la vez, porque ha sido producto de la evolución biológica y social del sistema nervioso, para dar alternativas y solución a uno de los problemas más fundamentales que enfrentan los seres pensantes: quién soy, la búsqueda del yo, de dónde vengo y cuál es mi misión en la vida.
La mente para construir el pensamiento, responde a la voluntad darwiniana que va modulando el árbol dendrítico con los movimientos reales y virtuales que captan los órganos de los sentidos, aunque, especialmente, los ojos viscerales y el Oculus Cerebralis, los cuales con las percepciones elaboran sentimientos que se van orquestando para formar pensamientos concretos, que se entrelazan con las redes neuronales del sistema nervioso consciente e inconsciente, voluntario y autónomo para llevar a cabo la reducción y transformación de la percepción en una reducción orquestada y objetiva.
Para construir el pensamiento la mente percibe y decodifica de dos maneras los estímulos percibidos por los receptores del cuerpo; a) la mente selectiva atiende y responde a las excitaciones, con respuestas reflejas con un lenguaje binario, sí o no, y, b) mientras que la mente denominada encubierta, procesa las percepciones de la mente selectiva para generar pensamientos abstractos, que forman ideas que se van superponiendo y entrelazado como un engrama mental, con un lenguaje cuántico, donde no existe el tiempo y tampoco una sola respuesta, y se puede responder o no responder físicamente.
Desde la neurociencia se ha propuesto que la mente selectiva, donde se forman los pensamientos objetivos, se encuentra en el interior del Tectum, núcleo del mesencéfalo el cual forma la parte superior del tallo cerebral, esta zona controla los movimientos oculares, el equilibrio y la audición para responder con movimientos de aproximación y evitación. El Tectum, es un procesador neuronal altamente especializado, indispensable para la discriminación sensorial y las decisiones rápidas requeridas para las reacciones de comportamiento necesarias para la supervivencia y la reproducción.
En cambio, la mente encubierta donde se genera el pensamiento subjetivo se localiza en las cortezas cerebrales prefrontal, parietofrontal dorsal y ventral y zonas de asociación sensorial.
Esta parte de la corteza cerebral, permite la atención encubierta, en la que el enfoque de la atención para generar pensamientos, no tiene que mirar directamente objeto o sujeto. Este tipo de pensamiento es bastante complejo ya que puede centrar la atención en recuerdos, planes y conceptos abstractos.
Desde el punto de vista evolutivo tuvieron que pasar más de 300 millones de años para que la mente selectiva u objetiva, pudiera generar y modelar una mente encubierta donde se elaboran pensamientos subjetivos y se estructurara una mente colectiva social y cultural.
Punto en donde la consciencia de una criatura fuera compartida inconscientemente por otros seres, formando una meta-consciencia en la cual, la mente propia ya no piensa como una criatura, sino como todos los seres a la vez y sus afilados pensamientos atrapen las ideas recluidas en el pensamiento humano; y como los fractales se reproducen y viajan en giros, en movimientos como los twistores del movimiento cuántico ancestral de las corrientes electromagnéticas, que acarician los bucles dendríticos alargados, que se separan como dedos transformados en brazos para atrapar las ideas recluidas en los axones de otras mentes generadoras de pensamientos cuánticos universales.
Lecturas
Vernant Jean-Pierre.The Origins of Greek Thought
Editorial Cornell University Press 1984
Waxman S.G Neuroanatomía clínica 26ª edición, Editorial McGraw Hill. México 2011.
Michael Graziano, “Una nueva teoría explica cómo evolucionó la conciencia”, Atlantic , 6 de junio de 2016,https://www.theatlantic.com/science/archive/2016/06/how-consciousness-evolved/485558
Enrique Canchola Martínez