24 de enero de 2022
Mi cuerpo siente el impulso misterioso
que creó la vida.
Mi esencia,
como en la suprema concepción del sol
conforma mi presencia,
haciendo de mí; conocida criatura.
El fuego del sol resplandeciente
nutre mi entraña,
vigorosa precisión,
armónico hálito de dualidad cristalina
engarzan mi existencia, en extensa simetría.
En la cotidiana andanza de la vida
en impulso constante
soy esquema que repite la moldura
de fecundidad venidera.
Mi ser,
es fuerza de atracción,
energía incolora,
multiplicativo constante de entropía.
Turbulenta vibración
acompaña mi camino al infinito.
Cada día mi aliento me asegura
que en posible distancia, estructura cierta me espera,
y en vigoroso impulso buscaré el retorno.
Flotaré en circular vorágine
o me propagaré en líneas espectrales;
dispersas en el mar y el viento.
Retornaré a la vida
con besos que mi orilla guarda,
el rugir del viento, repetirá el eco de mi risa
y en un abrazo amoroso seré presencia.