29 de julio de 2023
En mis manos pequeñas
el cuproníquel era más pesado,
más grande,
pero con el mismo valor,
aunque mi cándida imaginación lo extendía,
soñaba que alcanzaba para todo,
y mi mirada infantil se iluminaba,
mi miedo se ocultaba a ratos.
No me explicaba
ni entendía qué pasaba,
comprendía lo básico,
solo obedecía y hacía caso.
Sentía que Guerrero me sonreía,
-Vicente, el héroe-,
el independentista de un lado
del otro el escudo mexicano.
Era mi paga
de una semana
de cuando era niño y trabajaba.
Abel Pérez Rojas (abelpr5 @ hotmail.com) es escritor y educador permanente. Dirige: Sabersinfin.com #abelperezrojaspoeta
Facebook Social Comments